viernes, 4 de marzo de 2011

Que pequeño es el mundo

Como mencione anteriormente, termine la primaria en un colegio distinto al que empecé. Y agradecí mucho que así fuera. Pero siempre extrañe a las personas del viejo colegio.

Después de algunos años perdimos contacto casi por completo y no volví a saber nada de ninguno de mis ex compañeros o mis amigas Y los extrañe mucho, aunque no porque los quisiera a todos. De hecho, a algunos apenas y les hablaba pero no tenia que ocultarles nada. Si un día quería escuchar Megadeath y otro día escuchaba Bandana, estaba todo bien. Recibía siempre algún comentario de alguien a quien no le gustaba, pero nunca era con mala intención, todos te respetaban a su manera.
En el nuevo colegio, te decían la frase más hiriente que se les ocurriera y hasta que no te escucharan decir que esa música era horrible, no te dejaban en paz. Y no era solo con la música. Lo mismo iba para películas, novelas, formas de vestir, etc.
Por eso lamente mucho haber perdido el contacto con los otros compañeros. Con el tiempo me resultaba hartante tener que defender todo el tiempo mis gustos. Son míos, no tuyos ¿Qué te importa?.

El mes pasado, mientras cuidaba de mi casa, contrate un nuevo servicio de alarma. Vinieron, instalaron todo y unos días después pasó un cobrador para que abonemos los tres primeros meses. Mientras el hombre completaba el recibo, hablaba por teléfono con alguien de la empresa para que le pasaran mis datos y los de mi factura. Me pregunto si yo era Manzana, la titular. Cuando asentí, me paso su celular argumentando que alguien quería hablar conmigo y, suponiendo que me pedirían algún dato, atendí.

???: Manzana?
Yo: Si?
???: Habla Yanel,¿ Te acordas de mi?
Yo: … ¡Ah sí!, ¿Cómo estas tanto tiempo?

¡¡ERA ELLA!! La misma a la que le hicieron el chiste del SIDA. Y estaba ahí hablando conmigo. No hablamos mucho y no quedamos en nada. Al momento de devolverle el celular al hombre me extraño que ella no me haya pedido ningún número para hablarnos. Después note que, si trabaja en esa empresa de seguridad, ya tiene todos mis datos y es probable que me llame algún dia.

Hasta ahora no me llamo, pero seguramente lo hará. Dentro de tres meses, cuanto tenga que abonar nuevamente la factura.

No recuerdo quien dijo que éste es un mundo pequeño, pero ese día confirme que tiene razón.

miércoles, 16 de febrero de 2011

De ratones y mujeres.

Desde que tengo memoria, estuve viviendo en una casa quinta en zona norte hasta hace 2 o 3 años que decidí irme a capital con C.
La casa en cuestión, continúa a nombre de mi madre y si quiero venderla debo esperar a que termine la sucesión y dividir mitad y mitad con mi hermano. Mientras tanto, contratamos a G, una conocida (la que nos ayudaba con la limpieza) para que se quede 24 horas de lunes a viernes a limpiar y cuidar la casa.

Hace 2 semanas, recibí un llamado de mi tía. G se iba de vacaciones 15 días y yo debía cuidar y limpiar la casa mientras tanto. Guarde un par de cosas en un bolso, la notebook, la Wii y me vine.
Cuando llegue, salude a todos los que ya se iban y me quede sola un par de horas esperando a que C saliera de trabajar. Recorrí por primera vez en mucho tiempo la casa de piso a techo. El pasto estaba alto, ningún baño funcionaba del todo bien, casi ninguna persiana abría y algunas cosas más.
Aproveché que los tres primeros días llovió para limpiar y ordenar adentro. Lo que antes era el living de la casa se convirtió en el taller mecánico/informático de mi primo (que estuvo unos meses viviendo acá) dejando piezas de motor y teclados derretidos arriba de los sillones. También había una caja de vidrio con viruta y una rueda (de hámster) pero ningún animalito en ella.
Le reste importancia y continúe limpiando una biblioteca llena de enciclopedias del año 80 y algo. Escuche un ruido raro cuando moví uno de los tomos en el estante cercano al piso y unos segundos después mi perra (una Shar Pei negra de 3 años) vino corriendo y metió el hocico, olió un rato y empezó a mover la cola. Definitivamente, había algo ahí. Busque una linterna y alumbre el fondo de la biblioteca y lo vi, un hámster. Recordé entonces un charla que escuche entre mi primo y G:

G: Tu bicho se escapo
El: ¿En serio? *Revolviendo la jaula para comprobar que no esté escondido*
G: Si, capaz salió afuera y se lo comió la perra.
El: No creo, ya va a volver solo, vas a ver.
G: Jajaja.

Bien, el hámster es de mi primo, asique tenía que atraparlo. Me puse guantes por si acaso. Yo también tuve muchos hámsters y sé que si no pasan mucho tiempo con gente se vuelven ariscos y muerden. Lo agarré a la primera y al verlo bien noté que era un enano ruso. Era tan chiquitito que podría meter 4 de esos adentro de un foquito de 60w. Lo puse en su jaula, tape el hueco por donde se escapo y llame a mi primo. Se puso contento y pasó al día siguiente a saludarlo. Le comente que había tapado el hueco para que no se escape de nuevo y me respondió “Esta bien, no importa, total estas vos acá para volverlo a atrapar”

Se que hay gente que hace mejor algunas cosas que otras. Pero, que mi habilidad sea cazar ratones y ser comparada con un gato no creo que sea muy bien visto.
La próxima vez, lo dejo en libertad o me lo llevo a mi casa.
He dicho.

lunes, 24 de enero de 2011

Veraz o no veraz.

El sábado, mientras jugábamos 3vs3 con C y L (el hermano de C), me llego un sms bastante peculiar.

Por una cuestión de comodidad, mi celular aun continúa a nombre de mi madre. Cuando hable con Personal hace unos 5 años, me dijeron que si quería ponerlo a mi nombre debía llevar un certificado de defunción de mi madre junto con mi DNI.
Ni hablar, me enoje tanto que jamás lo lleve. Quizás mas adelante cuente el porqué.

El sms que recibí decía lo siguiente:
“SEÑOR XXXXXX XXXXX XXXXXX DNI 11XXXXXX. Ud. Ha sido publicado en el VERAZ por orden de FCM1, lo que implicaría que las empresas de móviles podrían suspender su servicio. Mandante s.a. TEL 011 5218-6146 de L a V de 9 a 18 hs.”

Si, el nombre y el número de DNI correspondían a los de mi madre.
Me pareció algo tan irracional lo que leía que fui a consultar con mi amigo Google. Encontré denuncias en foros y páginas web de personas que les pasa lo mismo. Según parece, varias agencias de cobranzas ubicadas en la calle Tucumán (entre el 1400 y 1600) están perjudicando a personas al azar queriendo cobrar una supuesta deuda.

Por el momento, me voy a limitar a llamar a defensa al consumidor y ver qué me dicen.
Si alguien tiene alguna información se la agradecería.

Ah, jugamos 43 arenas 3v3. Gamos 23 y perdimos 20.
For the horde!

miércoles, 12 de enero de 2011

La chica del bikini azul

Los quince días de vacaciones se nos pasaron volando.
Durante la noche, nos matábamos de risa con las boludeces que pasaban en Gran Hermano y durante el día disfrutábamos de la playa y aprovechábamos para broncearnos un poco.

En una de nuestras visitas a la playa, mientras estábamos tirados sobre una lona compitiendo con las morsas, tuve la tentación de darle una nalgada a C, de hecho, lo hice.
Él no me dijo nada en el momento, pero al llegar a casa surgió el dialogo:

-Usted me nalgueo en la playa, ¿Qué va a pensar la gente?
-Tenía que hacerlo, es mi forma de marcar territorio.
-Deja de mentir…
-Bueno, le voy a decir la verdad… había una chica mirándolo.
-¿En serio?
-Si, por eso tenía que mostrarle que usted es mío.
-Ah… ¿Y cómo era?
-No recuerdo, pero tenía una bikini azul.

Si, a veces nos tratamos de usted. Los días siguientes a esa charla, él andaba con la frente en alto haciendo amenazas con la chica imaginaria. “Si no me tras un vaso de gaseosa, me voy con la chica del bikini azul”, “La chica del bikini azul me dejaría dormir hasta tarde” y demás.

Espero que el pobre ángel sepa que era un chiste. No tiene ninguna chica de bikini azul que guste de él.
Solo tiene una novia pervertida que se aburre bronceándose.
Se aceptan Nintendo DS de regalo o mejor oferta.

miércoles, 15 de diciembre de 2010

Presente

Hoy, 15 de diciembre, es el día del trabajador camionero. Curiosamente, con mi familia tenemos una empresa de transporte. Irónicamente, también es mi cumpleaños.
Afortunadamente, todos los choferes están de viaje. Sería un poco incomodo saludarlos con un “Feliz día” y recibir un “Igualmente” a cambio.

Estos días, estuve bastante ocupada. A fines del mes pasado mi primo tuvo un accidente con la moto. Pasó de estar con la cadera, tibia y peroné quebrados, a no acordarse nada del accidente ni de la moto (Juro que no me voy a reír mas del padre de Candela), a escupir sangre y finalmente, a estar en su casa recuperándose bien, usando muletas y sin yeso. ¡Y todo en menos de un mes!

En fin, seguramente este fin de semana me vaya de vacaciones a Costa del Este. Muy lindo lugar, tan chiquito que no figura en el mapa. Desde que tengo memoria, siempre vacacionamos ahí.
Recuerdo que cuando tenía alrededor de 8 años, y decía en la escuela que mis vacaciones las iba a pasar en Costa del Este, todos mis compañeros me decían frases como “Qué bueno que tengas tanta plata y puedas irte allá” o “Uh, si te cruzas algún famoso sácale una foto” y la más llamativa: “Que genial que puedas salir del país”.
Tanto mis compañeros como la maestra, creían que Costa del Este era alguna playa o barrio de Punta del Este, en Uruguay. Lamento decepcionarlos, pero no. Costa del Este está sobre la Ruta 11 km 333, pasando Mar del tuyu pero antes de llegar a San Bernardo ¿Ubican?.

Si tengo suerte y consigo hacerme un lugarcito de tiempo, voy a tratar de postear mi linda odisea de renovar el registro que conducir y alguna cosita más.

Hasta la próxima.
Y no se olviden de usar casco.
En la cabeza.

domingo, 14 de noviembre de 2010

Say no more

A principios de mes, fuimos con P (mi tía) a una fábrica a comprar un puesto de trabajo en L para la oficina y unas sillas.
Por algún motivo que no terminamos de entender, los escritorios que se utilizaran para PC no se hacen de más de 1.20 de largo y por la disposición de muebles de la oficina lo necesitábamos más grande. Nos ofrecieron cambiar la bandeja del teclado. Pasarla al otro escritorio (o como lo llamaron ellos “pasarla al brazo largo de la L”) y aceptamos.
Como somos muchas personas en la oficina, cada decisión que tomábamos debíamos llamar y consultarla con todos. Desde el cambio de bandeja, hasta los colores o el tapizado de la silla. El celular de P sonaba cada 2 minutos para preguntar alguna cosa nueva o hacer algún cambio.

Cuando terminábamos, la vendedora que nos acompaño por todo el local recitando precios sin muchos ánimos, nos informo que en 15 días tendríamos todo listo. P le hizo saber que creía que era mucho tiempo y unos segundos después sonó su celular. Contesto y se alejo del mostrador para hablar tranquila. Mientras miraba los colores de tapiz para las sillas, la vendedora entablo conversación:

Ella: ¿Es tu jefa? (Mirando a P a lo lejos)
Yo: No. Es mi tía.
Ella: Ah.
(Unos segundos después)
Ella: Pero trabajan juntas.
Yo: Si.

No era una pregunta, pero igual sentí la necesidad de contestarle. Se rio unos segundos, puso cara de ‘ya entendí todo’ y no volvió a hablar hasta que P volvió.

Y sí, hay algunas cosas tan obvias a simple vista que no necesitan explicación.

lunes, 1 de noviembre de 2010

Pensamientos


¿No eras vos la que afirmaba que ir a 80 km/h cuando la máxima  marca 130 Km/h es un desperdicio?
Si, pero cuando tengo mucho sueño me pega un debuff que aumenta mi “miedo a pegarme un palo” en 375 puntos.
¿El sueño también te hace delirar?
No, eso de nacimiento.